
Los futbolistas mostraron su descontento con una acción de protesta sobre el terreno de juego.
Con el pitido inicial del colegiado almeriense Sergio Gil, los onces futbolistas del Écija Balompié que salieron frente al C.D. Guadalcacín, permanecieron durante varios segundos inmóviles e incluso fijando la mirada en el palco, como medida de protesta como ya ocurriese en la pasada jornada en el estadio Guadalquivir de Coria del Río.
La entidad azul y blanca adeuda tres mensualidades a jugadores, utilleros y cuerpo técnico.